flotando hechos pasados,

ni camino ni decido,
mas no entro en la depresión.
Me muevo entre chantajes emocionales,
deslizándome entre lo que quiero y lo que no deseo,
dejando que sea el paso del tiempo,
el que ponga las cosas en un sitio en concreto.
Por eso hoy,
caminando con la mochila de los recuerdos,
para no cometer los mismos errores de nuevo,
imagino como es mi futuro camino,
losa a losa creando el sendero.
No será un dorado enlosado hacia donde nace el arco iris,
ni será una senda de rosas con música de pianos y violas,
que ya se encargará la vida,
de poner trampas a todas horas,
mas será el recorrido por mi elegido,
y pobre del que no se aparte de lo por mi sentido,
que yo respeto el de los demás,
y lo mismo para mí pido.
Me encantan los días malos, me encantan más los días buenos, no me arrepiento del pasado y no lamento a nadie que haya encontrado, ¿no es cierto que de esos días hemos obtenido fortaleza? y de algun@s que un día nos defraudaron aprendimos aún más sobre nosotros mismos y sobre las relaciones, y sí todo mundo anhela ese respeto a lo que siente, quiere y vive, ojalá todos lo vieran así. Mmm un poco de filosofar, me haces recordar mis viejos libros de Nietzche.
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