Con el viento de Tramontana, descalzo en la playa, grito con denuedo mezclándose las olas y el viento con esas palabras arrancadas a mi sentir más interno.
"Fácil es lamentar, fácil senderos más felices imaginar, mas recuerda mortal, los caminos vueltos a recorrer nunca son como fueron ayer"
Esas voces que resuenan en mi cabeza, ¿son parte del viento, eco de otros lamentos o invisibles consejos de mi razón más intensa?
"Siempre se ama con intensidad, porque las llamas viven efímeramente, mas recuerda mortal que el amor en brasas se convierte"
Imposible discernir si es la locura del aire, musas infames, mi cordura juzgada o que mis gritos no sirven para nada. Vuelvo a lanzar... su nombre, muriendo en mi garganta por la fuerza del oleaje y me dejo caer en la arena, acariciado sólo por la pena.
"Lágrimas sin sentido son aquellas derramadas por un amor perdido, pues lo agradable es primordial para seguir sintiendo que valió la pena lo vivido"
!Maldito viento¡ Parece que mi razón se apodera de mis movimientos y hace que expulse cual bilis lo que siento.
Lentamente camino...,"Mira como tus huellas en la arena desaparecen", me vuelvo, el aire casi las borra pero el agua deja que quede constancia de mi caminar desolado. "así son los recuerdos, tus pisadas; así se van olvidando con el tiempo", no hay lágrimas, el viento ya me parece el susurro de miles de voces de personas por venir, unas serán amantísimas para mi, otras de las que me tendré que guardar; pero este viento de Tramontana ha barrido toda desesperanza.
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