Cuentan de un loco, que día a día, sonreía
tanto danzaba y cantaba
que de aire parecía se sustentaba,
hasta el día en que su casa fue la tumba fría.
!Aquí yace Pedro,
la sin razón fue su vida¡
Y cuando el gozo por su ausencia pasó,
hasta los días de primavera fueron grises,
que la vida no termina en "comiendo perdices",
y en los que se quedaron, la tristeza germinó.
(¿Siglo de Oro?)
No hay comentarios:
Publicar un comentario