A veces puestos entre la espada y la pared,
las decisiones no son las correctas,
se termina buscando las respuestas,
en caída libre sin red.
Sin pensar en las consecuencias te arrincono,
tu cara de turbación lo dice todo,
sin adivinar mi imaginación luchando con encono,
por hacer de la velada un sanalotodo.
Ahora, con mis manos en tus senos,
sin más barrera que piel y huesos,
sin dejar de mirar mis ojos,
sin olvidar los sentimientos.
Sin dejar que la premura te paralice,
sé pasional hasta los extremos,
sin permitir a los segundos,
nos roben del placer el vértice.
Por lo leido, sin estar segura de hasta donde llegarías, entre esas palabras y según el orden establecido...
ResponderEliminarEn algunas, los sentidos llevan hacia la duda mediante las letras, sin suspiros, ni tormentos, para llegar a la sensación de sentir los escritos algo forzados.
Eso si, las preposiciones .. UNEN.
Gracias .... siempre con una sonrisa