Enmascarando el propio olor,
creyendo adoptar un toque de distinción,
así mezcla de aromas diversos,
son usados diariamente sin pudor.
Paseando calle abajol
inundan perfumes mis fosas nasales,
trasladando mis recuerdos a otros lares,
mientras sonrío y lloro a la par.
Que evoca cada ser...
a un caminante acompañante otrora,
fue una suerte con unos y otras,
de todos aprendí como ser, o no, mejor persona.
Un perfume particular me inunda de luz,
pertenece a alguien por conocer,
aumenta el brillo en mi mirada,
y la ilusión a reverderecer.
Me he acercado para leerte Simplicisimus; ya tocaba. He recalado en esta playa, una playa poética, evocativa, olfativa... No soy de poemas, acaso de aquellos que saltan a mi con el brio de Benedetti o la msicalidad del eterno Becquer. Y como no puedo decir más, nada diré, salvo alentarte para que sigas escribiendo, pues como decía otro inglés famoso: el resto es silencio. Acaso no será esa la esencia de la poesía? la sabia combinación de palabras y silencios? Un saludo.
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