Cuando el amor muere buscas las piedras en el zapato,
cambiando de calzado no se cambia el pasado,
se sigue caminando.
Otras sombras cobijarán tu descanso y recordando,
recordando no disfrutas de la sombra,
pasado y presente serán separados.
Cuando el amor duele te acorazas,
proteges tu ser creyendo dejar fuera el infierno,
el paraíso siempre fue interno.
Acomodas la palma en tu pecho,
los latidos devuelven el remedio,
siendo tú, las maldades destruyendo.
Ya has jugado bastante con sus reglas,
las tuyas no le han gustado,
ni las de fuera, ahora que las ha probado.
No hay comentarios:
Publicar un comentario